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En un acto de colaboración y creatividad, la Casa de la Cultura de San José se transformó en el escenario de una obra de arte colectiva, con la creación de un mural diseñado por el destacado artista argentino Mario Lange. La actividad, que reunió a vecinos y artistas locales, dejó una huella imborrable en el corazón de los vecinos, al tiempo que consolidó este espacio cultural como un punto de encuentro clave para la ciudad.
El mural, que adornará las paredes de la Casa de la Cultura, fue una manifestación de arte y comunidad, concebido por Lange, quien lideró el proceso creativo. Junto con los vecinos de San José, el artista plasmó en la pared una obra vibrante que refleja la identidad y el espíritu del lugar.
Esta iniciativa no habría sido posible sin el apoyo fundamental de Pinturerías Silva y Uxell Pinturas, quienes realizaron una valiosa donación de materiales para la realización del mural. Un gesto de compromiso con el arte y la cultura que fue reconocido por todos los presentes.
En la intervención, estuvieron presentes el Intendente, Pablo Macchiarola, y la concejal Gabriela Garolera, quienes destacaron la importancia de este tipo de proyectos para fortalecer el lazo social y cultural en la ciudad. «Estamos muy contentos y agradecidos con todos los que colaboraron para que Yerba Buena tenga cada vez más cultura», expresó el Intendente Macchiarola, quien también participó de manera activa en la intervención del mural.
Por su parte, la concejal Gabriela Garolera, artista plástica e impulsora de la actividad, se mostró agradecida con los vecinos que se sumaron desinteresadamente al proyecto: «Este mural artístico, intervenido por Mario Lange y todos los vecinos de San José, es un reflejo de lo que podemos lograr cuando trabajamos juntos. Gracias a todos los presentes por embellecer nuestra ciudad jardín», comentó.
La intervención no solo embelleció un espacio público, sino que también fortaleció los lazos entre los vecinos, demostrando que el arte tiene el poder de unir y transformar comunidades. Este mural es una muestra más de la apuesta por la cultura y el arte como herramientas para la construcción de una ciudad más inclusiva y participativa.
Y así, con cada trazo y cada color, Yerba Buena sigue creciendo en cultura, arte y encuentros que enriquecen la vida de todos sus vecinos.
